Que primen los derechos fundamentales y no el lucro, pidió a la ANI el alcalde de Floridablanca, Héctor Mantilla

Héctor Mantilla

Un llamado urgente a las autoridades competentes para que protejan los derechos fundamentales de la población en calamidad pública, hizo el alcalde de esta jurisdicción Héctor Mantilla.

El mandatario  se pronunció ante la denuncia del desperdicio del agua que llevan los carrotanques hasta el municipio de Lebrija por medidas técnicas en la báscula de Palonegro y sobre los obstáculos que ponen en el mismo sitio,  para el paso de los vehículos que llevan agua a la población necesitada.

Explicó el alcalde de Floridablanca, Héctor Mantilla, que en una emergencia como la que se vive en la población de Lebrija, debe primar la razón y el sentido común, y las autoridades respectivas deben ejercer el  control  en esta situación, de tal manera que predominen los derechos fundamentales por encima de las condiciones técnicas.

Carrotanque  que lleva agua a Lebrija y ha soportado
la actitud  arrogante de los funcionarios de la báscula

“Le hacemos un llamado a la ANI, una exigencia para que por favor seamos mesurados y conscientes de la situación de Lebrija, que no prevalezcan condiciones técnicas por encima de los derechos que se pueden ver lesionados sino seguimos llevando el agua en su 100 por ciento de la totalidad; es inconcebible que el 30 por ciento se esté obligando a derramarse”, Señaló, airado  el mandatario florideño. De la misma manera la comunidad de Lebrija y del Área Metropolitana de Bucaramanga se ha declarado indignada por esta actitud absurda de la Agencia Nacional de Infraestructura, a través de la báscula de Palonegro por esta acción que fue calificada de inhumana.  

Para disminuir la crisis que atraviesa esta población, la alcaldía de Floridablanca desde el pasado 5 de enero dispuso de un carrotanque del cuerpo de bomberos, que diariamente transporta 55 mil galones de agua potable hacia Lebrija, uno de los municipios más golpeados por la intensa sequía, donde sus  afluentes se han convertido en verdaderos desiertos. Fuente: Oficina de prensa de la alcaldía