Una suspensión inmediata en las
actividades que se desarrollaban en la escombrera del Carrasco fue ordenada por
la CDMB después de detectar algunas
irregularidades que pueden afectar el medio ambiente.
Un informe técnico realizado por
expertos de la Subdirección de Evaluación y Control Ambiental de la CDMB señala
“que la escombrera se encuentra funcionando como un botadero de residuos a
cielo abierto, sin ningún tipo de control”.
La escombrera está habilitada
para la disposición de residuos como materiales de construcción y material
vegetal, como el proveniente de las podas realizadas a los arboles. Ampliación