Bucaramanga.- El transporte
automotor fue otro de los sectores de la economía que le dieron a la capital de
Santander uno de los valores más preciados dentro de su expansión histórica.
En el Mercado de víveres de la
ciudad, conocida como Plaza Central también creció la primera Central de
Transportes de Bucaramanga, por donde desfilaban los reconocidos automotores
traídos y ensamblados en la ciudad y donde había más movimiento de personal. Es
así como este lugar icónico de la
Capital de Santander contribuyó a la expansión de la llamada Area
metropolitana.
La plaza de Mercado fue
fundada sobre un resguardo indígena que era jurisdicción de Pamplona, el lugar
era un terreno que se había deshierbado para permitir el paso de los que
buscaban productos y en sus alrededores comenzaron a construirse importantes
Iglesias como la de San Laureano y la Capilla de los Dolores.
“El primer comercio del sector
era incipiente, con productos agrícolas expuestos en el piso acorde a la
modestia de los inicios, sinembargo la población comenzó a trabajar en la
higiene del sector, a cubrir las frutas y verduras y aislar las basuras para
permitir que los pobladores pudieran caminar fácilmente por el sector” aseguró
Emilio Arenas Sociólogo del Museo GUA.
Con el pasar de los años se da
inicio a la construcción de más Iglesias como la parroquia de Chiquinquirá y se
fortalece el crecimiento de los talleres mecánicos en toda la Quebrada Seca,
convirtiendo la zona de la Plaza de Mercado en la “Central de Transportes” de
Bucaramanga.
El demonio negro que recorría calles
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| Foto: wikipendia.org |
Al transporte formal de pasajeros
lo antecedió un hecho llamado “El
demonia negro que recorrió las calles de la ciudad.
El particular nombre fue
adjudicado a uno de los primeros automotores que recorrió la capital de
Santander en 1920. El automotor propiedad de un turco fue
ensamblado en un taller centrico y era utilizado como transporte alquilado por las trabajadoras sexuales del sector.
“El auge del negocio del
transporte fue tal que con la experiencia acumulada comenzaron a formarse
empresas de transporte propiedad de turcos que fueron muy importantes en la
época. El Demonio Negro y sus ocupantes también causaron inconformidad en
algunos sectores como la iglesia y las señoras de la alta sociedad” relató Emilio Arenas Sociólogo del Museo GUA.
La pugna entre los
transportadores por trasladar a las trabajadoras sexuales y las mujeres de la
alta sociedad hizo que se creara la Primera Norma de Tránsito de la ciudad y
fue la prohibición para montar en carruajes y automotores a mujeres de dudosa
procedencia.
“Pese a que aun no existían los semáfotos las
empresas de transporte y los talleres comenzaron a aparecer en la ciudad en
sitios estratégicos introduciendo la modernidad a Bucaramanga” indicó Emilio Arenas.
Estas y otras historias sobre cómo
se conformó Bucaramanga las puede conocer en el Museo GUA ubicado en el Parque
Memorial Jardínes La Colina donde disfrutará de un recorrido guiado por
conocedores que enseñan a visitantes
propios y turístas la importancia de Bucaramanga en el desarrollo del
país y el paso desde las pequeñas tribus como la Sachagua hasta la llegada de
los alemanes a la region.
Fuente: Prensa del museo Gua.
Ajuste de contenido y diagramación: bersoahoy.co
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